
El Cipotegato y Tarazona

Si nombro a Paco Martínez Soria, casi tod@s sabéis de quien estoy hablando, ¡si! , ese actor aragonés, que supo reflejar e imitar la esencia del españolito bonachón que llega a la capital y queda desbordado por su modernismo, adelantos, y falta de cariño de sus gentes, pues bien, si os cuento que este magnífico actor nació en Tarazona, ya me vais a empezar a entender el porqué de esta entrada de hoy.
Tarazona siempre ha estado en mi familia, deciros, que la primera vez que fui por allí no fue mi mejor día ya que una prima de mi marido me estrujo, aplasto, estampo…un hermoso tomate por encima y naturalmente yo rodeada de toda la familia de … tuve que sonreír y decir … «tranquilos ¡¡ja,ja,ja,!! no pasa nada». La segunda vez que fui al «Cipotegato» ya sabía a lo que me exponía y la verdad, fui preparada. Siempre digo que los pueblos o ciudades pequeñas como tal, no me gustan para vivir, lo sabéis, no me canso de repetirlo, aunque he de reconocer que para pasar unos días y desconectar son maravillosos, probablemente sea porque no tengo pueblo, soy urbanita, y cuando me preguntan que me llevaría a una isla desierta… siempre contesto lo mismo » cuatro plantas de El Corte Ingles» otro día os diré cuales.

vista de la Catedral
Tarazona en las fiestas del Cipotegato es un derroche de color…¡¡rojo!! Una tradición que se repite todos los 27 de agosto en honor a su patrón San Atilano. Son unas fiestas de interés regional y nacional. El personaje del Cipotegato va encapuchado y con los colores verde, amarillo y rojo, a las doce en punto y con la plaza a reventar de turasionenses, vecinos venidos de todas partes y un montón de curios@s como yo acompañados y viendo a la familia.
Se trata de acompañar al joven (Cipotegato) por distintas calles y plazas (recorrido) cuando entra en la plaza y empieza la marabunta de tomates por todos los lados hasta que llega otra vez a la plaza y sube a su estatua vencedor.
Gracias a mi prima Loli que me iba contando todo el desarrollo de la fiesta pude estar informada de todos los sitios por donde pasaba el Cipotegato y poder capturarlo con mi cámara. Pero como en todos los sitios, siempre hay alguien incívico y con muy mala educación que se pone delante justo cuando lo tienes todo preparado. Para mi consuelo pude ver a Marcos (mi hijo) corriendo justo al lado del Cipotegato.
No quiero acabar esta entrada sin deciros todo lo que podéis encontrar y disfrutar en Tarazona: El Moncayo cumbre más alta del sistema Ibérico, una mezquita, iglesias, claustros, una judería, un palacio, una plaza de toros octogonal, una catedral maravillosa e impresionante, barrios judíos, y ¡¡hasta casas colgantes!!, buenos restaurantes y buenísimos lugares de tapeo, un conjunto histórico/artístico por descubrir.
Hoy nos quedamos con la fiesta , el bullicio de estos turiasonenses, su Cipotegato y como no, con mi familia y amigos .
Poco a poco os iremos mostrando en nuestra sección «Lugares y Placeres», las maravillas que nos rodean, sus gentes , costumbres, cocina, historia y lo mejor …poder trasladarnos atraves de esta ventana maravillosa y poder sentirnos como si estuviéramos allí.
Desde estas paginas os invito a esta localidad de Tarazona una tierra llena de historia y arte por todos los rincones, así que cargar vuestras baterías y disponeros a conocerla, ¡¡ no os defraudara!!
** esta foto no es mía, la he cogido prestada para que veáis al Cipotegato , como se pone la plaza del ayuntamiento y que hay fotógraf@s con mejores vistas que yo ja,ja,ja!!.
Fantástico post!
Saludos.
Muchas gracias!! Rocío, encantadas de tenerte por aquí.